lunes, 30 de julio de 2012

H. Mon amour.-

Me atrapas, me desconciertas, me desorientas y me vuelves a atrapar. Te miro, te siento... la cliché electricidad recorriendo mi cuerpo, el reloj vuela y yo me quedo. Te quiero... te quiero para mi, te quiero para lo que dure este tiempo, te quiero por lo que no eres, te quiero porque estás ausente. Llega la noche y a tu despedida la acompaña la ansiedad y la incertidumbre. Me matas paradójicamente  en el mismo lugar donde yo maté a otro más. Me gustas, que desconcierto...


"¿Por qué no tú, 
en esta ciudad y en esta noche, tan idéntica a las demás 
que incluso podría confundirse?"

viernes, 27 de julio de 2012

En resumen: Paciencia.

Reconozco cierta vergüenza de mi parte al recordar tu despedida, y más que la despedida todo lo que vino antes de ella. 
Te recuerdo sonriente, alegre, te recuerdo preocupado y a veces dominable. 
Me recuerdo sonriente, alegre, me recuerdo regalona y a veces dominante. 
Nos recuerdo juntos, los infinitos abrazos a mitad de la carretera, las celestiales miradas al despertar, las complicidades en la oscuridad. Nos recuerdo sin pudor (te recuerdo mostrándome al mundo), nos recuerdo y te extraño, nos extraño.
Recuerdo la despedida, ese intento por parecer fuerte frente a ti a pesar del nudo que ataba mi garganta, recuerdo la vergüenza al caer mis lágrimas mientras te besaba, recuerdo ese adiós con sabor a "nos vemos"...


Super mamona ¿y qué tanto?

domingo, 15 de julio de 2012

La fotografía.

Fuiste tan mio en aquel entonces, fuiste la fusión de mi carne con tu sudor, fuiste el desvelo incontenible en largas horas de pasión, fuiste la inocencia y la ternura de la adolescencia, fuiste el primer intento... y ahora todo parece tan lejano, el pasado parece una ensoñación, una época tan alejada del presente que vivo hoy. Todo tan abstracto, todo como el aire, todo idealizar y fantasear, todo tan pueril. Miro el pasado y no parecen 4 años, parecen 40 desde entonces.
Hoy miro nuestra fotografía y me siento feliz, porque en 4 años he cambiado tanto, en 4 años he podido comprender lo que a los 16 no podía configurar dentro de mis esquemas... y sabes qué? debo agradecer a la vida por todo lo que pasó, porque por muy cliché que sea siempre después de la tormenta sale el sol, y el sol no es volver a sentirse invencible, es precisamente sentir que eres un ser humano como cualquier otro, que te puedes equivocar, que puedes sentirte mal,  tener pena y querer llorar sin pensar en sentirse más débil por ello.
Hoy por hoy el pasado ya no parece ser el tormento que fue antes, ahora es solo una parte de la vida, como muchas otras más.

jueves, 5 de julio de 2012

Descargos.


Si pudiera enviarle una carta a alguien explicándole mi problema… ¿a quién sería? Difícil es de partida ventilar los problemas personales y más aun lo es pedir dinero. Por dónde empezar, es complicado pensarlo cuando el miedo y la incertidumbre te invaden por completo. No podría explicarle al mundo lo difícil que es ver a un hermano en esta situación, ver a una persona con una inteligencia deslumbrante perderse en una adicción, verlo de cuando en vez con la vista desorbitada, con disatria, como en otro mundo… ver cómo mis padres sufren con estos episodios y aun más triste ver cómo la desesperanza se apodera de ellos con la falta de dinero, porque claro ¿quién se mejora en este país sin dinero? Ni siquiera con una cantidad moderada de dinero, sino una cantidad exacerbada de billetes que le brinden el apoyo a una persona con dependencia a una sustancia. Y quién responde por eso? Al presidente poco le debe importar que a mi familia ya no le quede dinero para seguir internando a mi hermano, aunque mucha voluntad exista de nuestra parte, a los ministros tampoco les debe aproblemar que un ciudadano se esté apagando lentamente, un ciudadano que quizá el día de mañana termine en la calle por la falta de oportunidades, o no mejor dicho por la falta de dinero para ayudarlo a salir adelante. Es una angustia terrible, en verdad no quisiera que nadie pasara por esto… uno se imagina lo peor dentro de esta nebulosa de incomprensión, uno imagina escenas de esa persona robando para conseguir sus objetivos, imagina que esa persona no va a llegar a la casa por un par de días y nadie sabrá de él, imagina que cuando vuelva esté todo drogado y nadie le abra la puerta, imagina que se quede dormido como un perro a la entrada de tu casa… todo por falta de oportunidades.
Es en estos casos en que más me cuestiono y más me dan rabia las desigualdades de este país, pienso en que el que tiene dinero pareciera tener todas las facilidades y oportunidades mientras que al que le falta se le van cerrando una a una las puertas… Y me da impotencia, pienso en todas esas personas que ya han pasado por esto y han tenido un final trágico, pienso en cuantas veces buscaron ayuda y nadie se las brindó, pienso en su dolor, su angustia…
Es una lástima que en este país que dice querer derrotar al subdesarrollo aun no sea capaz de generar un buen sistema de salud y en específico una buena atención psicológica o psiquiátrica para las personas, porque no señores los COSAM no son suficientes, no basta con estas bien intencionadas instituciones… faltan recursos. Falta expandir de partida la salud, promover los buenos hábitos, para así ahorrar en la enfermedad. Falta invertir todo ese dinero de crecimiento económico anual en mejorar cosas tan básicas como la salud de la gente… Y así queremos ser un país desarrollado…
Me apena este país, me apena este mundo, me da coraje que la gente muera de frío en las calles mientras otros beben su Johnnie Walker, me apena que muchos vean eso y no les produzca náuseas, que sea una realidad tan aferrada a su mundo que ya no produzca incomodidad alguna… Y lo que más me apena es que en este momento es poco lo que yo pueda hacer… pero no me puedo quedar en ese sentimiento, es en estos momentos donde surge  la fuerza para seguir adelante y trabajar en un futuro no muy lejano por cambiar las cosas, por quizá no erradicar todos los problemas pero si quitarle un peso de encima a la gente que necesita y no tiene las oportunidades, para que el día de mañana pueda contarle a mis nietos que el mundo donde yo vivía era muy loco y que luché con todas mis fuerzas por cambiarlo.

domingo, 1 de julio de 2012

PERSEVERANCIA&ENTUSIASMO

Estoy en estado de shock y necesito escribir para resolver este conflicto. Por mi mente solo escucho la palabra "no", me quedo pegada mirando la nada y pensando en qué hice mal. A estas alturas no sé si desmotivarme o encontrar consuelo en la resiliencia, debo llegar a la segunda opción pero aun me siento inmovilizada para simplemente dar vuelta la página y seguir con mi vida normal.
¿Qué ocurrió? No, no, no... (aun estoy en estado de negación). Ideas idiotas recorren mi mente, cosas tan absurdas como que no soy buena en esto, es esa pulsión tanática que recorre mi mente y busca autodestruirme (que ironía). No sé si reír o llorar, no sé si tirarme abajo o... Oh oh (muchas respuestas "o"). Mierda, mierda, mierda. Sí, me estoy comenzando a sentir inservible y prescindible. Debo inyectarme una dosis de optimismo en este momento, sentir que a pesar de todo he aprendido, que a pesar de la adversidad el mundo sigue adelante... ¡Si! eso es lo que necesito, pensar que aun puedo ser una ayuda en el mundo, enfocarme en el futuro y en quién quiero ser, salir adelante y perseverar aun más para lograr mis objetivos... ¡Ahí está! Nuevamente la perseverancia entra en juego y no debe ser en vano. Perseverancia y entusiasmo es la clave para la resiliencia.