martes, 25 de marzo de 2008

Juegos de Otoño

De vez en cuando una hoja loca me roza los cabellos dulcemente.
Veo hacia arriba y los árboles me saludan con una lluvia seca.
Si miro el suelo veo el asfalto mojado. Siento el aroma de la tierra húmeda.
Mientras por el frente de la avenida un hombre va con un paraguas sobre su cabeza. Y el único sonido audible entre ese hermoso silencio es el de las hojas al caminar.

La lluvia recorre mis mejillas; sonrío. Una canción pegajosa juega en mi mente y me hace tararearla mientras muevo los dedos. Mis cabellos lentamente se vuelven espesos y mis pasos más densos. Los charcos se vuelven amigos de mis pies; los empapan.
Un leve estornudo se me escapa.

Llego a casa, me quito los zapatos y mis pies se ven ancianos. Me tiendo sobre mi cama y llega mi madre con un té caliente.
Me quedo así hasta que el sueño me vence mientras la luna resguarda mis fantasías nocturnas.

lunes, 24 de marzo de 2008

El recordatorio

Cuando le dijo que estaba sola no fue un estado momentaneo, siempre lo estuvo y quizá siempre lo estará.
"Ahora entiendes mis palabras?. Siempre te dije que soy cautelosa con mis palabras y si digo algo, es por algo (valga la redudancia)".
Siempre le gustó jugar ese juego transitorio. Te veo, te uso, te desecho. Y luego de todo volvía en sí y recordaba que todo había sido un juego, no más que eso. Se había aprovechado de ese hombre por inspiración en una poesía y quizá unos sueños perdidos en su inconsciente pero más allá de eso no fue... por qué? porque los alejaba de la mejor manera que sabía alejar hombres, asustándolos. Haciéndoles creer que estaba falta de cordura, generalmente.
Ay si un día llegase uno que rompa ese esquema, que esta pobre niña estará desorientada, aunque sabrá que ese hombre la entenderá y consolara, le robará la incertidumbre para cambiarla por sonrisas que le dará. Dejará en el baúl de los recuerdos la timidez para ser uno con su amante no prohibido. No cambiará su escencia, eso nunca, pero si dejará muchas cosas de lado (lo que ella no crea necesario, y afortunadamente tiene las cosas muy claras). El día en que el príncipe del cuento de hadas llegue esta niña seguirá siendo feliz como siempre lo ha sido, pero encontrará alguien con quien compartir su felicidad por mucho tiempo más. Será alguien que esté dispuesto a tener los 7 hijos que ella quiera criar y será un buen padre para los 7. Les enseñará a pensar por sí mismos, detalles de la vida, a no sacar una flor de la planta, a guardar un papel cuando no hay un basurero cerca. Les dirá pocas veces que los quiere y le costará demostrar afecto a los niños, pero por algo dicen que los padres se complementan. A esta muchacha le sobra la dulzura y el cariño. Los arrullará por las noches, les susurrará canciones al oído por las noches, les tomará en brazos cuando lloren, les felicitará por sus logros así como le castigará por sus faltas. Les dirá que si saltan de la ventana de la casa podrían caerse, como también no. Y les incentivará todo tipo de artes. Les compará instrumentos musicales y les enseñará a tocar la guitarra desde pequeños, les hará leer poesía, le hablará de lo poco que conoce de arte (su marido deberá ayudarla en eso), les nombrará a Frida Calo, quizá a Van Gogh, a un Da Vinci, Picasso y otros más. Les hará ver películas en familia y comentarlas. Les enseñará a no tener miedo a decir lo que se piensa, siempre y cuando sea de la manera adecuada. Les dirá que todo es relativo. Les mostrará tanto un lado científico como humanista, les dejará elegir. Les amará con todo su ser y los dejará ir cuando decidan partir.
Y ahí quedará, envejeciendo con su marido, iendo a montar un caballo, viajando en tours de la tercera edad, viendo fotos de cuando los niños eran bebés, invitando a sus amistades a su casa a recordar viejos tiempos y seguir construyendo una historia. Llamará a Rayén A., Camila S.S., Camila R, Camila S., Maritza Q..
De sus amigos creo que no quedará mucho, ya que todos habrán hecho sus propias vidas y ella quizo alejarse de más de alguno por motivos sentimentales (oh melancolía...).
Cuando muera su acompañante, caminará por las calles, dará paseos por el centro de Santiago junto a su perro (los gatos están cuidando la casa), se sentará en bancas y dirá "Recuerdo cuando aquí...". Vivirá de recuerdos... al menos por un tiempo. La muerte de un esposo no es fácil, sobretodo cuando se es ya mayor... Te crea problemas físicos y psicológicos (por más que lo niegue un médico, no le creerá). Y su vida se irá apagando lenta y agonizantemente, más sola que nunca. Ya no tendrá ni los recuerdos de compañía. Sus ojos brillantes se irán apagando, sus dientes se caerán al igual que su cabello. Los pulmones le fallarán por esos 4 años de cigarro que fumó compulsivamente cuando adolescente. Tendrá cáncer.
Y quien lea este escrito sabrá que no quiero tomar pastillas, no quiero tratamientos, no quiero nada que provenga de la medicina. Ya viví lo que hicieron esas cosas con mi abuela y no quiero que me ocurra lo mismo.
A ustedes, personas que se dieron el trabajo de leer esto... Mis últimas palabras son... No lloren mi partida por más que no muera feliz. Créanme. Quisiera que mis cenizas vayan a mi eterno enamorado, el mar. Si no fuese mucha la molestia quiero que en mi velorio un pequeño grupo toque en vivo la sonata claro de luna, de Ludwig Van Beethoveen.
Gracias a todos.

domingo, 23 de marzo de 2008

En una botella...

Cristales de azúcar para resguardar
mi reino del más acá.
Frondoso en fantasías
y melodías danzantes junto al mar.
En el firmamento estrellas veloces,
deseosas de cumplir afanes de los demás
y entre jardines de girasoles andantes
la luna no deja de alumbrar.
Bienvenido a mi mundo rosa pastel
donde todo lo falso tiende a ser cierto
si puedes mirar bien.

jueves, 20 de marzo de 2008

Sonidos constantes

No, no eres tú... soy yo. Cuando dije que necesitaba un tiempo lo hice por mí, es por eso que decidí huir como los cobardes para pensar. No, te dije que no lloraras mi partida porque sabías lo mal que me hace ver lágrimas en tu rostro, sobretodo cuando sé porque están ahí. ¿Si hay otra oportunidad?, pero si te dije que necesitaba pensar y darme un tiempo para mí. Ha sido demasiado el tiempo que dejé pansar junto a tí y ambos sabíamos que no estábamos bien, siempre lo supimos desde aquel primer día ... No, no te des vuelta para mirar como me voy porque sentiré tus ojos en mí nuevamente y me confundirás. No quiero sentir tu mirada clavada en mi cuerpo, ahora no...
Si, siempre te dije que amaba tus ojos pero nunca te dije que te amaba a tí, y si no lo hice fue por algo... Es que eran tus ojos de los que me enamoré sin querer y es a ellos a quien pretendo olvidar, o almenos dejar de mirar como lo hago. No!, que cabeza hueca eres te dije que no eras tú, soy yo, o acaso necesitas que te lo repita mil veces para comprenderlo? Aun así lo hiciera sé que no comprenderías porque tus ojos no me pueden escuchar... Nunca aprendiste eso, en todo este tiempo juntos no aprendiste a hablar con la mirada como siempre quize que lo hicieras. Y soy yo la que está desconforme con eso. Por más que aprendieras, creeme que no sería lo mismo.
Sólo quiero un tiempo para mirar otras cosas, para volver a enamorarme del mar y la poesía. Quiero alejarme porque me cegaste con tu forma de ser y ya no puedo ver lo que más me gustaba de tí, tus ojos...

domingo, 9 de marzo de 2008

Wasted Years...?

Pero todo cambió aquel día que mi hermano mayor fue al psicólogo y le diagnosticaron depresión severa... Ya no eran los tratos iguales, ya no es todo como antes. Al comienzo lo comprendí, era cierto que mi hermano debía sentirse bien en casa, que debíamos mimarle, quererle y darle ciertos privilegios, pero esto cruzó los límites que yo estaba dispuesta a aceptar.
Nadie me entendería, nadie sabe lo que es sentir como estoy ahora... Aún recuerdo ese 13 de enero del 2004, donde mi hermano fue por primera vez a ver a NUESTRO grupo favorito, Iron Maiden, yo tenía 11 u 12 años, creo que estaba en el proceso de 6to a 7mo básico y por una neta cosa de edad no me dejaron asistir. En ese instante lo comprendí, sólo en aquella fecha, ahora soy una adolescente ya formada con 16 años de edad, que ya lleva un par de recitales alos que ha asistido, los más multitudinarios fueron "El Sueño Existe", Roger Waters y The Police...
Todo se remonta a la fecha anterior al recital de The Police en Chile... yo quería ir, me gustaba muchísimo ese grupo, lo encontraba genial!, e hice todo lo que estuvo a mi alcanze para ir... creo que llegué a decir muchas cosas... cosas cmo cuando mi padre me dijo "Si no vas, no importa ya que yo te compraré la entrada para que asistas a Iron Maiden" a lo que yo respondí con un "No, prefiero mil veces ir a The Police que Iron Maiden"...
Las palabras me jugaron una mala pasada, y aquí estoy ahora, escuchando en la radio "The Trooper", imaginando a mi hermano, primo, amistades que deben estar ahí disfrutando al máximo el recital y yo aquí entre estas 4 paredes, perdida entre la pena que me invade...
Ojalá pudiera fingir una depresión y poder tener lo que quisiera por parte de mis padres... ojalá fuera una persona débil que se deja llevar por el resto, ojalá pudiera... tantas cosas !. Pero no, estas son sólo palaras escritas, espero no me jueguen una mala pasada, nuevamente... Porque en el fondo de mí sé que quiero seguir como estoy. Sé que me encanta tener seguridad de mí, sé que me gsuta disfrutar cada momento de la vida, sé que me encanta sentir pena porque me siento viva...
"Don't waste your time looking for those wasted years, face up... make your stand
And realise youre living in the golden years"