Señoritas, los caballeros también tienen su opinión·~

"Me molesta de las minas su sentimiento de superioridad "No, este weón no, ¡ni cagando!, ¡mira como es!, es bajo y wea!" Weón... tampoco son barbies. Hasta el día de hoy, contadas con los dedos de las manos, hay minas perfectas que saben que lo son y se lo creen, pero creeme que nos sobrarían dedos a todos los hombres, de minas que se hacen las interesantes, pero creeme que tienen muchos defectos. Miran a muchos hombres en menos cuando ellas mismas no valdrían ni la mitad de lo que esos weones valen porque a esos weones (y me incluyo en todo lo que siempre fui muy respetuoso de las minas) nunca los pescaron. Es fácil, el único tipo de hombres que ustedes van a pescar es aquel que las incita, aquel que sepa calentarles bien la sopa, luego combina eso con ternura y algo de tiempo y tendrás lo que quieras de ellas. ¿Por qué chucha siempre eligen weones y después se quejan de que los hombres se meten con puras minas fáciles, si después van a portarse de una manera pretensiosa a cagar, mirando al mundo entero en menos? Sé que no son todas pero ahora abundan y cada día son más. Con ese tipo de comportamientos en el mundo común y silvestre de a poco se te va muriendo el caballero andante. No sé para que piden principes azules si no son princesas... Pero bien, que después se sienten heridas y nosotros cambiamos nuestra forma de ser. Luego, cuando el weón que eligieron las cague de alguna forma, se sentirán heridas y actuarán de la misma forma en despecho y caemos en un círculo vicioso. Al final todos quieren algo bacán y nos llenamos la boca de cosas hermosas, de flores, de amor eterno y de ese tipo de cosas pero somos nosotros mismos los que con el tiempo nos cagamos esa imagen por la que después cuando ya son adultos vas y sabes que el príncipe azul y la princesa no existen, aunque tu hijos vean mucho Disney sabes que igual en las películas de Hollywood los hombres siempre son musculosos, las minas ricas y los autos bacanes. Es lo que todos pretendemos buscar de una forma casi arribista a veces y de tanto menospreciar a la gente y su valor, perdemos el valor que nosotros mismos podríamos tener" Hernández, C. (2010).

De vez en cuando
como mujeres
nos hace falta
la opinión masculina...
aunque debo reconocer
que no me esperaba
una visión tan fría
y tosca
de la realidad.